Uno de los tópicos más tratado, especialmente por su impacto en importantes sectores de la economía, es la Ley 189-11 para el Desarrollo del Mercado Hipotecario y Fideicomiso.
Pero, ¿de qué se trata y qué implicaciones tiene en el país? El fideicomiso es cuando una persona transfiere uno o más bienes a una fiduciaria, la cual se obliga a administrarlos o manejarlos para cumplir una fidelidad determinada por el constituyente en beneficio suyo o de un tercero.
Así lo definió el gerente general de la Fiduciaria BHD para Colombia y República Dominicana, Gustavo Vergara Restrepo, en el primer seminario práctico de fideicomiso celebrado ayer por las empresas BDO, Esenfa y GCS Group.
En la actividad participaron expositores de Colombia, Bolivia, Estados Unidos, Panamá y del país, quienes explicaron todos los pasos y procesos que implica esta ley y su ejecución.
Para el presidente del Centro Internacional de Estudios Fiscales (CIEF), Raúl Hernández Báez, el fideicomiso permite transferir voluntariamente y durante un tiempo determinado, la propiedad de un activo para que sea administrada por un tercero.
Explicó que se puede constituir sobre cualquier tipo de bienes y derechos, sean estos muebles o inmuebles, tangibles o intangibles.
Según Hernández, entre las necesidades que busca satisfacer esta ley se encuentran reducir el déficit habitacional, crear facilidades financieras para la compra de viviendas, dinamizar el sector construcción y ampliar las alternativas de inversión a los inversionistas institucionales.
Destacó que los beneficios que otorga el fideicomiso al sector construcción del país es que permite nuevas formas de financiamiento a largo plazo, permitiendo incurrir en mayor cantidad en varios tipos de proyectos.
Además dijo, se pueden obtener tasas de financiamiento a las iniciativas y compradores o usuarios de viviendas.
Más beneficiosHernández manifestó que a los inversionistas institucionales y a los fondos de pensiones les beneficiaría para incrementar la diversificación por sector económico, por tipo de instrumento y por tipo de institución.
La otra ventaja es que reduciría el nivel de riesgo del sistema incrementándose la rentabilidad esperada. Hernández planteó que en el sector financiero y el mercado de capitales, el fideicomiso beneficiaría en el mayor número de instrumentos a ofrecer a los clientes y se crean nuevas fuentes de fondeo y de esta forma se estimula el crédito a largo plazo.
Entre los beneficios macroeconómicos, Hernández citó que se generarían empleos, contribuyendo con el crecimiento y el desarrollo económico y se incrementarían los vehículos de ahorro y las inversiones domésticas.
La gerente general fiduciaria de Lafise en Panamá, Cinthya González, consideró que “hasta el momento, el negocio fiduciario es considerado un negocio complementario de los servicios bancarios”. Especificó que el crecimiento del mismo empezará por entender estas diferencias con los bancos y se formalizará como un producto generador de importantes ingresos para cualquier organización.
“Nuestros países tienen legislaciones distintas que permiten ejercer el fideicomiso bajo la estructura de bancos, entidades independientes con licencia especial y/o personas naturales y jurídicas sin mayores requerimientos”, manifestó González.
Destacó que las ventajas del sistema fiduciario son: carga y generación masiva de datos, registro de clientes desde prospectación, consolidación de la base de datos y conciliación bancaria en tiempo real.
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TIPOS DE SISTEMAS FIDUCIARIOS ADMINISTRACIÓN
El gerente general de Fiduciaria BDH en Colombia y República Dominicana, Gustavo Vergara Restrepo, explicó que existen varios tipos de fideicomiso como son: planificación sucesora, cultural, filantrópica y educativa, de inversión, inmobiliaria, oferta pública de valores y productos, en garantía, administración y fuente de pagos públicos.
TIPOS DE SISTEMAS FIDUCIARIOS ADMINISTRACIÓN
El gerente general de Fiduciaria BDH en Colombia y República Dominicana, Gustavo Vergara Restrepo, explicó que existen varios tipos de fideicomiso como son: planificación sucesora, cultural, filantrópica y educativa, de inversión, inmobiliaria, oferta pública de valores y productos, en garantía, administración y fuente de pagos públicos.
Entre las funciones que tiene a su cargo un fiduciario, citó: contabilizar las obras que se ejecutan en el proyecto y servir de fuente de pago al crédito otorgado por entidad financiera.
Para administrar el sistema fiduciario, Vergara mencionó que es un negocio especializado, entre la segregación de sus funciones están las áreas comerciales de operación de negocios, contabilidad, asesoría fiscal, tesorería y área legal. Destacó que el control de riesgos del fideicomiso es muy diferente a los riesgos de intermediarios financieros.
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